No me
importa el resultado de un partido, no me importa qué hagan o dejen de hacer
los príncipes de Asturias, no me importa que una persona se case, se divorcie
miles de veces… o que se opere, o que le haya puesto los cuernos a su novio.
No me
importa si un político se traba en directo, o si un reportero se equivoca…
Todas estas cosas no me importan una mierda, y todos los medios de comunicación
no hacen más que invadirnos de gilipolleces.
Me importa en qué se gastan el
dinero público, me importan las numerosas agresiones que se dan cada día, el
maltrato animal, me importa la corrupción en mi país, me importa saber la tarea
que tienen que realizar los políticos,
saber si realmente la cumplen. Me importa el nivel educativo de España,
me importa cada ciudadano… Pero nadie me habla de esas cosas. Señores, que el
país se está hundiendo, y estamos tirando fuera del barco los botes. Eso carece
totalmente de sentido, todos lo sabemos, pero, ¿por qué no hacemos algo?
Olvidémonos
de los partidos políticos, olvidémonos de si República o Monarquía, olvidémonos
de todos los signos que separan a este país, vamos a la calle, sin banderas, sin que ningún partido nos represente. Salgamos a la
calle a reclamar el poder que nos han quitado.